sábado, 22 de abril de 2017

Autocuidado

En una sociedad donde los logros, los éxitos personales y profesionales son lo más importante en la mente colectiva, el perderse uno mismo, olvidar sus prioridades o simplemente desconocerlas, puede ser muy sencillo.

Y pareciera que el cuidarse uno mismo, ha pasado al final de la escala de prioridades de los seres humanos.


De hecho, pareciera que las personas se han ido a los extremos en este tema de cuidarse a si mismos. Es decir, por un lado existen quienes tienden a cuidar en mayor medida a otros, olvidándose así de su propia persona. Son los que dan, sin esperar recibir nada y en efecto, no reciben. 
Y por otro lado quienes se dan demasiado pero, nocivamente, es decir, demasiado trabajo, demasiado alcohol, demasiado estrés, demasiados conflictos interpersonales.



El autocuidado consciente se refiere a darse a sí mismos en una actitud positiva, y contempla varias acciones que inician con el amor o cuidado a la persona en todas sus facetas: en el ámbito de la salud física, pero también en el ámbito de la salud emocional. Se trata entonces, de no ser violentos con uno mismo. De tratarse bien.




Cada vez que una persona se descuida físicamente, no alimentándose, no durmiendo, o ingiriendo sustancias tóxicas, como alcohol o drogas, esa persona está teniendo una relación violenta consigo misma. De igual manera, quien no pone límites en sus relaciones personales, y quien no busca ayuda cuando la necesita, se está violentando a sí mismo (a).



Y alguien que se relaciona con violencia consigo mismo (a), se relaciona, de igual manera con los demás, y con su entorno, es decir, con violencia. Entonces, cuidarse uno mismo, es iniciar una relación no violenta, primero con la propia persona y después con el mundo.
No violencia, no significa debilidad, así como el darse uno mismo no significa egoísmo.



Como expresara el psicólogo, Erich Fromm: "La enfermedad consiste en elegir lo que no es bueno para nosotros."

miércoles, 5 de abril de 2017

MERECIMIENTO Y AUTOESTIMA

El merecimiento está relacionado con la autoestima.

La autoestima es el grado en el que una persona se valora, de aquí que el tamaño de nuestros deseos sea del tamaño de nuestra autoestima.


Si nuestra autoestima es alta y saludable, la persona se esforzará por conseguir sus objetivos, en caso contrario su esfuerzo será mínimo o nulo.


Pero también es importante la aceptación: “yo merezco que me pasen cosas buenas, y me muevo para conseguirlas”.



Una persona que se quiere poco a sí misma, sentirá que merece poco, sus pensamientos serán algo así como “ no merezco este trabajo”, “ no merezco una familia feliz”, etc. O, por el contrario, cuando sufren algo difícil, sus pensamientos son: “me lo merecía”.


Existen personas que creen que no merecen algo y entonces no trabajan por conseguirlo, y por supuesto nunca lo consiguen.


Lo importante aquí es revisar de qué manera estamos disponiendo de nuestra energía, dónde están nuestros pensamientos y emociones y pensar que todos los seres humanos, simplemente por el hecho de existir merecemos lo mejor.


Revise, lo que usted cree que merece y piense a detalle, si tal vez le haría falta esforzarse más, entonces reflexione acerca de su autoestima.

Y por cierto, para aquéllos que tienen hijos, les recomiendo no decirles a su(s) hijo(s), “no te compro esto, porque no te lo mereces”, utilice, por favor, otro argumento, pero no utilice el merecimiento, porque entonces van a crecer creyendo que no merecen muchas cosas, y si creen que no lo merecen, es un hecho que no lo tendrán,… y usted, revise lo que quiere, lo que cree que merece y lo quiere merecer.





lunes, 3 de abril de 2017

TOMA DE DECISIONES


Se ha preguntado alguna vez: ¿Cómo es que logra tomar sus decisiones? 



Comencemos comentando que todos los días nos encontramos con opciones a elegir. Tomar una decisión es un proceso casi diario.  

Generalmente nos encontramos con dos tipos de decisiones: las decisiones diarias y las decisiones de vida. Las primeras corresponden a nuestras pequeñas decisiones que tenemos que realizar cada día, como por ejemplo, dónde o qué comer el día de hoy, dónde pasar unas vacaciones, etc. Este tipo de decisiones son importantes pero no son de vital importancia como las decisiones de vida. Entre las decisiones de vida podemos mencionar las siguientes: qué carrera estudiar, en dónde estudiar esa carrera, con quién contraer matrimonio, etc.  


Definitivamente siempre saldrán a la luz nuestros valores y nuestras expectativas, sin embargo, para las decisiones vitales, es importante dedicarles más tiempo, más razonamiento y más análisis, no dejarnos llevar por una apariencia o mensaje ambiguo. 




Por ejemplo, la publicidad ha explotado el conocimiento de la mente humana, en específico lo concerniente a la comunicación verbal y no verbal. Está comprobado que el ser humano, atiende en mayor medida la comunicación no verbal a la verbal en un 80%, de aquí que los cursos de ventas y de imagen sean el día de hoy una herramienta importante que enseñan a las personas a lograr sus  objetivos. Sin embargo, cuando no encontramos frente  a una decisión de vida, definitivamente es conveniente no dejarse llevar por la pura imagen. 

¿Se casaría usted con alguien exclusivamente por la apariencia física? Si usted, querido lector, respondió positivamente, le deseo mucha suerte, porque la necesita. ¿Escogería la universidad de su hijo(a) por la publicidad únicamente o por el color de la fachada del inmueble? Espero que su respuesta sea negativa y usted pueda tomarse el tiempo de ir a conocer el campus, planes de estudio, perfiles de egresados y porque no, obtener algunas impresiones de estudiantes en activo. Y que lleguemos a un momento en que seamos capaces de comprar un producto no solamente por la publicidad sino por su calidad y coherencia entre lo que ofrece y su utilidad real.

Dejemos de ser títeres de la comunicación no verbal y comencemos a ser más analíticos, más estrictos en la búsqueda de información, comencemos así a exigir a las empresas que fabriquen lo que prometen.

Comencemos a analizar nuestras decisiones de vida para evitar caer en el “si hubiera pensado mejor las cosas.”



Porque todos sabemos que el hubiera no existe.


PROPÓSITOS

Generalmente cuando inicia un nuevo año, la mayoría de las personas establecen sus propósitos o metas que desean alcanzar. Sin embargo, lo que generalmente sucede es que, los primeros días se encuentran muy motivados “ahora sí, voy a dejar de fumar”... o “voy a iniciar una rutina de ejercicios”,“regreso a estudiar”, etc., pero, conforme va transcurriendo el tiempo, esa energía llamada motivación comienza a declinar poco a poco, hasta desaparecer, y entonces, las personas dejan a la mitad sus proyectos para, nuevamente proponérselos el siguiente año nuevo. Y así sucesivamente… es un ciclo en el cual las metas no pasan de ser eso precisamente, “metas por alcanzar”. Es aquí donde vemos que realmente lo que hace falta en muchas personas es el desarrollo de una habilidad personal llamada automotivación, es decir, la capacidad de cada persona de encontrar una fuente interna de energía que le permita guiar sus esfuerzos,-pese a los obstáculos-, hacia la obtención y logro de esa meta en específico.

A continuación, te brindo algunos tips que te permitirán automotivarte y ahora sí… cumplir tus metas.



  • Que tus metas sean objetivas y realistas.
  • Que tus metas sean alcanzables, en el marco de tus posibilidades y si van de acuerdo con tus talentos, aún mejor.
  • Que tus metas puedan ser evaluadas a corto y mediano plazo. De hecho, evalúate tú mismo(a).


  • Que sean de tu competencia, es decir, relacionadas con tu persona y que por supuesto, el éxito dependa de ti (que se refieran a cambios en ti no en los demás, por ejemplo, sería muy frustrante que tu meta sea que tu pareja deje de fumar)
  • Si un día no cumpliste con tu objetivo, no te desanimes, reanuda al día siguiente tu compromiso, y recuerda que una pequeña recaída es solo eso: “una pequeña recaída”.
  • Disfruta de tus metas, y concéntrate en lo que ya tienes, en lugar de sufrir por lo que te falta. 
  • Aprende a reírte de tu persona.







EL CICLO VITAL: VEJEZ

La vejez se caracteriza por un declive gradual del funcionamiento de los sistemas corporales. En un estado de graduales cambios degenerativos, que involucran cambios psicológicos. Estos cambios psicológicos pueden ser positivos o negativos, según cómo lo observe la persona, según sus creencias personales, familiares y sociales. Esto quiere decir, que la vejez no necesariamente tiene que ser una etapa de angustia o sufrimiento. Depende de la persona cómo se considere a sí misma y cómo quiera vivir éste periodo.

Existen indicios de que nos afirman que al llegar a ésta etapa (65 años en adelante), es cuando el organismo siente o resiente el cuidado que se le dio en los años anteriores. No es lo mismo llegar a ésta edad con años previos de tabaquismo, sedentarismo y emociones negativas continuas. Los estudios actuales de neuroactivación cerebral nos confirman que la mayoría de las personas de la tercera edad pueden conservar sus capacidades físicas y psíquicas, especialmente si continúan ejercitando su cuerpo y su cerebro. El primero con ejercicios guiados o accesibles como la caminata, etc. y el segundo a través de actividades de atención, concentración, memoria, etc.

Generalmente lo que caracteriza éste periodo es la pegunta hacia sí mismo “¿he vivido cómo he querido?” “¿conseguí lo que me propuse?”, de alguna manera, el ser humano, comienza a replantearse lo que ha sido su vida y lo que ha hecho en el transcurso de la misma. Cuando éstas repuestas nos son satisfactorias puede venir lo que el Psicólogo Erikson denominaba “etapa de desesperación”, es decir, se puede sentir insatisfecho por sus logros y por ende desesperado ante el pensamiento de que ya no tiene tiempo suficiente para comenzar otra vida.

En éste periodo, de igual manera, el adulto mayor ha vivido pérdidas, de amigos, incluso de familiares, y esto lo lleva a plantearse a sí mismo la posibilidad de su propia muerte. También ha experimentado pérdidas en torno a su persona, posiblemente su salud no sea la mejor; en el campo laboral, seguramente ha experimentado la jubilación, y con esto, la baja autoestima. Incluso, en algunas familias, el adulto mayor ha perdido su independencia, debido a causas físicas o psicológicas y se convierte a sí mismo en una persona que depende nuevamente de sus familiares más cercanos. En el proceso de saber vivir la vejez mucho cuentan las actitudes y acciones de la sociedad que rodean a la persona.


También es importante mencionar que en ésta etapa se vive la dicha de ser abuelos, lo que le brinda al adulto mayor una oportunidad más de enseñar, de guiar y por supuesto de trascender. Es entonces cuando analizamos, si el adulto mayor ya no puede procrear, efectivamente sí puede seguir creando. Quiero citar nuevamente el Psicólogo Erikson (Erikson y Hall, 1987), quién afirmó:
“El paso a la tercera edad no pone fin a la generatividad (productividad) de una persona. A medida que la categoría de las personas mayores aumenta, éstas permanecerán implicadas en los asuntos del mundo durante mucho más tiempo.”

Contempla, entonces, a la tercera edad como un período más productivo y creativo que en el pasado –en el que un artista de 80 años, escritor o músico, ya no serán algo excepcional.


LAS MUJERES Y EL ALCOHOL

Mucho se ha escrito acerca del alcoholismo, sin embargo, en ocasiones existen grupos sociales que tienden a pensar que el consumo de alcohol es una adicción que afecta directamente a la población masculina, lo cual es un error. En los últimos años, las estadísticas nos revelan que la mujer ha incrementado sustancialmente su consumo de alcohol, ya sea de manera aislada, es decir, en su casa, o con grupos de iguales, es decir, con amigas o incluso familiares; y hablamos tanto de mujeres adultas como de adolescentes.

En antaño, era más frecuente observar los bares con la mayoría de población masculina, hoy en día, es por igual.  Sin embargo, existen estudios que nos indican que el daño que produce el alcohol es significativamente mayor en la mujer que en el varón. “La mujer asimila menos la agresión del alcohol, que ataca, hígado, cerebro y corazón. 
Tiene cuatro veces más toxicidad en la mujer que en el hombre.” 

Expresa Eugenio Aguilar Parada en su obra “Mujeres, bebidas alcohólicas e infarto”.

En otro tipo de estudios se ha encontrado que la mujer mexicana incide en cuadros depresivos con mayor frecuencia que el varón, de hecho el estrés en la mujer se ha visto incrementado precisamente por el estilo de vida, Hoy en día la mujer que trabaja, se ve a sí misma cumpliendo una doble función, trabajo y hogar; por otra parte, la mujer que no trabaja se siente disminuida en su valor personal por no tener acceso a una vida económicamente activa. Ambos casos pueden producir depresión y resultar en un aumento de ingesta de alcohol. El hábito en el consumo de alcohol puede iniciar por una o dos copas cada fin de semana, de tal manera que se vuelve una costumbre. Una costumbre que aumenta cada ocasión. Hasta aquí, la mujer puede pensar que “ no pasa nada”, sin embargo, de repente se encuentra abandonando ciertas responsabilidades, o poniendo excusas a las mismas. Hasta que llega a presentar deterioro en su imagen, y en su salud física.

Por lo tanto es extremadamente importante que si usted es una mujer y se ha dado cuenta que ingiere alcohol con frecuencia, haga un alto en su vida y se decida a realizar un cambio. El alcohol nunca resuelve nada, de hecho, dificulta la toma de decisiones y empeora las relaciones personales. Además recuerde: la mujer presenta mayor daño físico y deterioro por consumo del alcohol que los hombres.

sábado, 25 de marzo de 2017

El poder de la primera impresión

Ha escuchado la frase: nunca se tienen dos oportunidades para dar una primera impresión.

En la mayoría de los casos, ésta frase resulta ser cierta.

Está demostrado que, cuando conocemos a alguien, o cuando entramos a un establecimiento por primera vez, nuestro cerebro registra todas las pequeñas señales no verbales, ya sea de esa persona, o del lugar en cuestión, en tan solo unos segundos.
Este mecanismo de evaluación rápida e inconsciente tiene que ver incluso con una situación adaptativa.

En la evolución de nuestra especie ha sido importantísima esta evaluación rápida, desde el hombre de las cavernas hasta situaciones difíciles actuales, la evaluación rápida acertada, ha sido la diferencia entre sobrevivir o no sobrevivir. De aquí, que, podríamos decir, el evaluar una primera impresión como positiva o como negativa, es un mecanismo aprendido de nuestra especie.

Hoy en día también se ha comprobado que el cerebro tiene una memoria emocional. Por ejemplo, si usted vive una experiencia negativa que le provoca una sensación de enojo en un lugar determinado, la siguiente vez que usted asista a ese lugar, la emoción será experimentada nuevamente. Lo mismo sucede con las relaciones interpersonales. 
De hecho, usted puede olvidar la razón por la cual una persona le resulta desagradable, sin embargo, esa sensación de "desagradable", persiste cada vez que la ve o escucha hablar de esa persona.
De igual forma, influyen en la primera impresión, los comentarios previos de personas con quienes tenemos una relación afectiva o de confianza. Es decir, el ser humano, se predispone fácilmente.

Si usted tiene un negocio, establecimiento, consultorio u área de atención a clientes, esta información es importantísima para el éxito en sus ventas. Ya que un servicio amable en un lugar cómodo y seguro incrementa notablemente el número de clientes.


Pero, si lo que desea es causar una buena impresión, entonces lo más importante es la coherencia. La coherencia entre su comportamiento verbal y no verbal. Como se dice normalmente: sea usted mismo. Y si no logra causar una buena impresión a la primera, con todas las personas, busque sus áreas de oportunidad, pensando en incrementar sus estadísticas, sin obsesionarse al respecto. Tampoco es posible como se dice caerle bien a todos, todo el tiempo.

Efectos psicológicos de la primavera.

Con la llegada de la primavera, al igual que se observan cambios en la naturaleza, o en el ambiente, como lo es el aumento de la luz, también se pueden observar cambios en la fisiología del ser humano, como lo es el aumento hormonal. Se incrementa la producción de melatonina y serotonina. Y si bien este cambio puede traer mayor felicidad y alegría a muchas personas, también se correlaciona con el incremento de energía en otras áreas de la vida, como sería por ejemplo, el incremento del ímpetu sexual. Por supuesto, en parejas estables, se observa que la calidad de la relación y la gratificación del vínculo aumenta en ésta época.


Sin embargo, para muchas personas, puede ser un poco difícil la gestión de esta carga energética y puede traducirse en impulsividad. Estudios de redes sociales han confirmado que es durante la primavera que las parejas se disuelven, aumentan los eventos de infidelidad y de discusiones por temas menores que al no procesarse debidamente llegan a desencadenar en rupturas. Por lo que la búsqueda de apoyo profesional, puede convertir esta experiencia en una gran oportunidad de crecimiento personal para las parejas involucradas.


De igual manera, las dificultades y malos entendidos aumentan, y con ello el uso de la agresividad. De aquí que la recomendación a la población en este aspecto pudiera ser el ejercicio o la práctica deportiva durante esta época del año.

En los adolescentes la actuación impulsiva suele ser más recurrente por lo que se recomienda aumentar la guía y supervisión de los padres. Así como propiciar la comunicación con ellos y estar al pendiente de sus cambios de ánimo.

Por otra parte, el adulto joven puede ser más proclive de padecer accidentes, especialmente en aquellos que combinan la impulsividad con la actitud en extremo optimista. Para ellos, los entrenamientos en inteligencia emocional pueden ser los más recomendables. Aprovechar su energía, tal vez en una actividad emprendedora puede resultar muy positivo.

Y para todos, el entrenar nuestra mente y nuestras emociones, seguro nos prepara para cualquier época del año.

sábado, 11 de marzo de 2017

Día de la Mujer

Para la mujer en nuestra sociedad uno de sus roles más importantes es el rol de cuidadora, y, paradójicamente uno de los retos más importantes que tiene hoy en día la mujer, es el hecho de ejercer el rol de cuidadora de sí misma.
Cuidar de sí misma, requiere en primer lugar, quererse y valorarse.




Esto implica dejar atrás antiguos condicionamientos sociales y asumir nuevos paradigmas.

El primer cambio de paradigma sería el no quedarse ni colocarse en último lugar en la satisfacción de necesidades tanto físicas como emocionales. Sino en primer lugar.

Quien cuida y protege a los demás, necesita estar bien en su persona, especialmente en su salud, en todas las áreas que esto implica. Algo parecido a lo que se enseña en los cursos de primeros auxilios, donde siempre se enfatiza que " si usted va a ayudar a los demás, primero póngase el salvavidas" o como se indica en los aviones, " primero colóquese usted la mascarilla de oxígeno y después a quienes le rodean".

Es muy difícil cuidar a otros cuando se tiene un cansancio acumulado, o cuando se transita por un período de ansiedad o depresión. La ansiedad y la depresión pueden ser resultado de un periodo prolongado de atención a los demás en combinación con descuido personal. Y mucho de este descuido personal puede provenir de un desequilibrio entre las exigencias del entorno y la capacidad física de la mujer.

O también en el desequilibrio entre las exigencias que la mujer misma se impone.

Exigencias del tipo, ser perfecta en todos los ámbitos. Lo cual puede llegar a ser muy desgastante.

Entonces el segundo cambio de paradigma seria el no buscar la perfección, con base a estándares externos. Sino una mejora continua, con base a estándares internos. Con base al autoconocimiento y reconocimiento de las propias necesidades.


Qué tal si hoy, como nuevo paradigma, asumimos las mujeres que no tenemos que ser perfectas, sino felices?  Que podemos comenzar por cuidar de nosotras mismas y eso sería un primer gran paso, en el día internacional de la mujer.

FAMILIAS EN RIESGO


Las familias en riesgo, son aquéllas que, por sus propias características y especialmente por sus pautas de relación, están en riesgo de generar hijos con problemas de adicciones, ya sea alcoholismo o drogadicción. Se ha encontrado que el principal factor de riesgo se encuentra en las pautas educaciones que siguen los padres especialmente por su miedo a generar conflictos internos debido a una eminente incapacidad para resolverlos.

Entre las principales acciones de riesgo que pueden cometer los padres, están las siguientes:

·Complacer en todo a los hijos. Con el pretexto de evitarles sentimientos de frustración “a tan tierna edad”, los padres pueden caer en la trampa manipulativa de los hijos que consiste en lo siguiente: el niño llora, los padres complacen. Esto es muy peligroso, ya que un niño que ha aprendido que consigue sus objetivos a través de éste método, manipulativo por cierto, cuando se convierta en un adolescente, habrá creado otras estrategias similares y más peligrosas, como son el enojo prolongado hacia los padres o las amenazas de abandono a la familia.



·Evitar que tengan una vida organizada, hábitos y actividades recreativas productivas. Un niño o un adolescente que pasa su tiempo libre viendo televisión o jugando los famosos videojuegos, está creciendo sin una estructura de implementación de sus propios límites. Pensemos que el establecimiento de límites, hasta los 6, 7, 8 años es una función paterna, posterior a ésta edad, el niño debe ser capaz de programarse a sí mismo actividades, controlar su tiempo y tener conductas de autorresponsabilidad, como sentarse a hacer su tarea sin que los padres se lo exijan o sin que se genere una guerra familiar para que el niño(a), decida sentarse a cumplir con sus deberes.


·Y, por supuesto, la pérdida del liderazgo de los padres. Una familia estará en grave riesgo cuando los hijos buscan fuera de casa los personajes a quienes admirar. Cuando se ha perdido esto de que “mi papá es el mejor” y cuando la influencia de otras personas es más fuerte que la de los padres. Hablemos que los padres deben ser líderes no importa la edad de los hijos. Así que, padre o madre, les recomiendo que no pretendan ser amigos de sus hijos, pueden comprenderlos, y fomentar la comunicación, pero nunca como amigos, ustedes son padres y como tales fungirán como guías. Sus hijos ya tienen o tendrán muchos amigos(as), pero figuras parentales solamente a ustedes. Los hijos se sentirán mejor sabiendo que tienen guías y líderes que siempre los amarán, y que nos los lastiman sino que los educan, de lo contrario, estarán criando hijos con riesgo de caer en el alcoholismo y la drogadicción.

martes, 7 de marzo de 2017

CICLO VITAL DE LA FAMILIA: LOS HIJOS ADOLESCENTES

La familia con hijos adolescentes presenta a su vez nuevos retos. 

Generalmente coincide con la etapa de mayor productividad de los padres, es decir, su crecimiento profesional.

Existen culturas donde el inicio de la adolescencia marca también el inicio de la independencia de los hijos, siendo éstos a su vez promotores de ésta necesidad de desapego. 

Sin embargo, es una etapa en la cual los chicos requieren de supervisión y de modelos de identificación positivos y, si las figuras paterna, materna o el tutor, no fingen como tales, precisamente por la dedicación a su crecimiento profesional,  entonces, el mayor riesgo es que, ése chico(a) adolescente obtenga dicha identificación de otras figuras, en éste caso no parentales.  

La buena noticia sería que pudiera identificarse con algún personaje sano y positivo, como algún deportista, la mala noticia sería que escogiera modelos negativos que lo inciten al alcohol o a las drogas. 

Aquí sería importante resaltar que, cuando un chico escoge una figura negativa también hay responsabilidad en la familia. Hay veces que los padres dirán “son los amigos los que le dan un mal ejemplo” sin embargo, podríamos preguntarnos ¿porqué el chico adolescente escogió precisamente esos ejemplos negativos?

Es difícil aceptarlo, pero esa elección es un síntoma de que algo pasa en la familia. Tal vez sería el momento de que los padres dieran un respiro a su vida profesional y personal y se pregunten “qué necesitamos mejorar”.

Otro de los peligros de ésta etapa es que los padres impidan el alejamiento o desapego de los hijos, retardando así su independencia. 

Sin embargo, es importante mencionar que lo ideal es, como padres, orientar la educación hacia la interdependencia, es decir, fomentar su independencia pero con valores internos y apego a ciertas costumbres familiares, mismos que, finalmente, forman parte de la célula de nuestra sociedad: la familia.

Erradicar la violencia contra la mujer

Erradicar o eliminar la Violencia contra la mujer en nuestro país, supone una tarea no fácil, una tarea en la cual hay que estar conscientes que involucra a más de una generación.  Estamos hablando de años de violencia hacia la mujer, en sus distintas facetas y lo más terrible en su faceta no aceptada, en ésta creencia del hombre de que no es violento. Y en ésta creencia de la mujer de que así son las relaciones.

Por lo tanto es imprescindible acercarse a las historias de cada una de las familias que viven violencia hacia sus integrantes femeninas, y observar cómo, desde este punto de vista transgeneracional, la mujer ha tenido un aprendizaje social en el cual lo más común ha sido normalizar una situación de violencia, es decir, lo vive como algo normal, y en muchos casos como un castigo o como si el haber nacido mujer pudiera suponer haber nacido en una posición de desventaja.

Y de generación en generación, se vive una falta de autoestima, un estado de indefensión hacia la situación y un miedo a ser rechazada. Todo esto ha llevado a muchas mujeres a construirse un mundo en el cual tiene que aceptar las conductas de violencia.
De aquí que lo importante sea la aceptación de que la violencia no es solo golpear y dañar sino que existen otros tipos de violencia como la psicológica que tal vez no sea tan reconocida pero que daña igual que los golpes.

Dentro de este tipo de violencia tenemos: El control, que se ejerce cuando se le impide salir, y se le impide socializar, Es decir, aislar a una mujer de su familia o de sus amistades.
La violencia económica. Cuando la mujer no decide cual será el destino del dinero que ella misma generó. 

Y la violencia patrimonial, cuando la víctima ve afectados o anulados sus bienes. Y escucha justificaciones tales como Te estoy enseñando, te estoy educando, te hago entrar en razón, te ayudo a proteger, no te hace falta nada, etc.

Entonces, La mujer que vive en un ambiente violento se adapta porque ha aceptado el abuso de poder. Junto a este rasgo, y como consecuencia del dominio, aparece la dependencia hacia el agresor.

Empezar por aceptar esto, sería un buen comienzo.

PROYECTO DE VIDA Y PROSPERIDAD

“NUESTRO DESTINO PROVIENE EN ÚLTIMA INSTANCIA DE LOS NIVELES MÁS PROFUNDOS DEL DESEO Y TAMBIÉN DEL NIVEL MÁS PROFUNDO DE LA INTENCIÓN. AM...